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El hígado graso es una condición silenciosa que afecta a millones de personas sin que lo sepan. Se desarrolla por una acumulación excesiva de grasa en el hígado, causada por una mala alimentación, el sedentarismo y el estrés. Aunque puede ser reversible, si no se trata de un tiempo, puede evolucionar a enfermedades más graves. En este artículo, descubrirás sus síntomas, factores de riesgo y cómo puedes sanarlo naturalmente con cambios en tu dieta y estilo de vida.

• Cansancio o fatiga constante

• Dolor o molestia en la parte superior derecha del abdomen.

• Sensación de pesadez después de comer.

• Náuseas o malestar estomacal

• Pérdida de apetito

• Hinchazón abdominal

• Orina oscura

• Heces pálidas

• Pérdida de peso sin razón aparente

• Confusión o dificultad para concentrarse (en casos avanzados)

La medicina tradicional china enseña que el hígado está estrechamente ligado a las emociones, especialmente el enojo y la frustración. Cuando reprimimos estas emociones o vivimos en constante estrés, nuestro hígado se sobrecarga, afectando su capacidad para desintoxicar el cuerpo. Aprende en este artículo cómo identificar las emociones que impactan tu hígado y qué prácticas naturales pueden ayudarte a equilibrarlo.

• Ira

• Frustración

• Enfado reprimido

• Impaciencia

• Resentimiento

• Estrés

• Irritabilidad

• Amargura

• Tensión emocional

• Falta de perdón